26. Fede Pérès

Desde el primer día somos viejos amigos. No sabemos como ocurrió. Opinamos bastante parecido de algunas cosas pero lo contrario en otras, eso hace a nuestras conversaciones interminables. Dicen que los animales tienen una percepción especial con las personas. Nina no es una excepción. Ayer, al llegar se puso inmediatamente a jugar con Fede. Se subía a su regazo. Por suerte le gustan mucho las mascotas porque ya me ponía incómodo que mi gata estuviera tanto en el medio.
Federico no quiso cocinar ni que yo lo hiciera, para él era una excelente oportunidad para volver a hacer lo que hacíamos con frecuencia hace unos años.
- Che, ¿que vamos a cocinar?
- Birra.

Con esa respuesta supe que el menú sería de “La Yapa”, la parrilla regenteada por Ringo y que la cerveza correría por cuenta del almacén de Osvaldo. Asado para él, “milanga” para mí.

Federico es de pocas palabras, de esos del comentario breve, de risotada difícil. Pero es cultor apasionado de la buena charla, de bueyes perdidos, de opinión medida. Correcto y respetuoso por fuera, no delata su interior de barrio hasta que entra en confianza o si tiene una guitarra cerca. Extrañamente, nos conocimos en ESPN, nunca nos habíamos cruzado antes aunque él viviera siempre a 50 m de Santa Helena (la parroquia donde iban mis amigos de adolescencia) a metros del anfiteatro en el bulevar de los sueños rotos en Cerviño. Mientras que yo fuí al Colegio San Ambrosio y él al San Martín de Tours compartimos a Amasino, profesor de música, así que a el también le preguntaron con voz potente: - ¡¿Finalidades de la música?!

Viajamos en tren desde el trabajo, allí comenzó nuestra charla y fuimos directo a ver a Nina, Rodri ya estaba ahí con su bicicleta nueva y zapatillas viejas. Estuvimos un rato pero salimos a comprar nuestra cena antes de que todo cerrara.

Mequetrefe enclenque.
“Fede Pérès vende tevé en ESPN. Lee en el verde cesped en vez de entretenerse en pequeñeces. En él, vencer el estrés es tener temple, él es decente, creyente” cosas como estas nos escribíamos hace tiempo, como felicitarnos los cumpleaños con frases con “e” como: Merecés este presente, que festejes (celebres). Cosas que parecen una rareza con Fede son naturales. Como las poses de suricata alpinista que ponía Nina para que él le diera algo de su asado.

Hablamos, nos reímos como Statler y Waldorrf, los viejos del palco de los Muppets. De todo lo que, como nunca, me contaba. In vino veritas (cerveza en este caso) me puso al corriente de los próximos pasos en su vida, su casa nueva a la que se mudará a fin de mes, su perro Muro, las mascotas y su familia, siempre con esa seguridad que siempre muestra en su forma de hablar. Y con ese ánimo me dio una lección de amistad que voy a seguir al pié de la letra. Porque Fede tiene mucho que enseñar sobre lealtad y fraternidad, es amigo de vocación.

Menú: Asado de tira, sandwich de milanesa completo, papas fritas, Warstainer y Ella Fitzgerald.

Noté que ahora hablamos de cosas distintas, antes solíamos alternar temas de navegación (es fanático del mar y las velas), cosas breves de filosofía e historia, de los libros. Incluso llegamos a comprar libros para leerlos los dos (Los reyes malditos y Los reyes católicos). Hablábamos también un poco de política. Poco porque estamos en lugares opuestos pero no muy lejanos de la ideología. Ayer casi no tocamos ninguno de esos temas. Será que ahora los dos estamos con planes y proyectos y preferimos discutirlos, muy diferente a la situación en la que nos conocimos, los dos estabamos "estables" mirando el pasado y el presente. Ayer los dos mirabamos el presente pero proyectando futuros diferentes.

Así que este es Fede, invitado desde el principio, primero no pudo por su agenda, luego porque ya había otros confirmados, después las vacaciones... pero llegó el día y poder cumplir un deseo, como siempre, lo que no devió haberse interrumpido, charlar con un viejo amigo.

5 comentarios:

  1. Oh Dios que pequeña es Nina! A4 a
    media cuartilla... Hola Fede!

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  2. Hola Alé! Si la verdad que es Mini (na). No por el tamaño si no por sus posturas, sospechamos con Nacho que tiene descendencia suricarezca...

    Fede.-

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  3. Alé: Es pequeñita, pero como es flaquita no parece bebé, parece una pantera negra en pequeñito.

    Fede: es una Surigata!

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